Pedro Martínez vuelve a ganar en la Fonteta 9 meses después (71-81)




El regreso de Pedro Martínez era el gran evento de un partido donde ambos equipos se jugaban las pocas opciones que tenían para clasificarse al Top 8, unas más y otros menos pero ahí estaban. Valencia Basket necesitaba la épica para clasificarse, con esa mochila de piedras que ha llevado a rastras toda la temporada (lesiones y rachas de derrotas) algo que Baskonia sufrió a principio de temporada, pero del que resurgió de sus cenizas para tratar de alcanzar el Olimpo.

Finalmente Valencia Basket no tendrá opción de tirar de épica (despide la temporada regular recibiendo a Maccabi, 8º) y deja a Baskonia con opciones de seguir creyendo, en un partido que ganaron gracias a un Marcelinho Huertas que sigue dando clases de baloncesto en su vuelta a Europa, dirigido por un Pedro Martínez cuya última derrota data del 14 de mayo, aquella derrota que se mira con otra perspectiva en un campo que aquel día le abucheó; pero que en su regresó le aplaudió, alabó y honró como a pocos en la siempre exigente Valencia.



El partido empezó con Baskonia dominando el marcador con un parcial de 0-6 y defendiendo como si no hubiera opción de perforar el aro, pero Valencia contestó con un gran 8-0 de parcial liderados por un incombustible Fernando San Emeterio que cambió el rumbo del partido en aquel punto (dando él también un clínic de baloncesto como su ex-compañero Huertas).

El 11-10 al ecuador del cuarto mostraba la igualdad de ambos, donde buscaban favorecerse de las carencias ajenas, donde la defensa estaba poco presente. En cambio, el ataque de ambos equipos estaba siendo un vendaval en aro ajeno, abusando del tiro exterior (con acierto irregular) y tratando que sus virtudes pudiesen compensar sus fallos

20-16 terminó el primer cuarto, donde Sergi García anotando en los minutos finales con una jugada ya consagrada de calidad propia y un palmeo de Illimane Diop finiquitaron un periodo con muchas idas y venidas donde gobernó el santo (8 puntos en el cuarto para San Emeterio).


El segundo cuarto empezó con Marcelinho Huertas empatando el partido y Sastre ponía distancia desde el triple. Un inicio frenético para un partido en el que los puntos caían de las manos, nada raro teniendo en cuenta la calidad de ambos, pero si sorprende porque ambos suelen jugar con un estilo menos directo.

Johannes Voigtmann y Tornike Shengelia eran los jugadores que más destacaban por parte del combinado vasco, que tenían como oposición a un enchufado Joan Sastre con 8 puntos en el cuarto y un Bojan Dujblevic que fue entonándose poco a poco en el cuarto.

Al ecuador el marcador reflejaba un 28-24 que mostraba esa marcha extra que estaba llevando el bólido naranja en este cuarto, dejando pocas opciones a Baskonia de reacción;porque a pesar de estar cerca en el marcador, Valencia mantenía la distancia siempre que intentaba superarlo en el marcador.


Al descanso se llegaban con un 36-31 que mostraba que el ritmo anotador había bajado pero ambos contendientes estaban mostrando una gran nivel de juego, salvo en momento puntuales, con Bojan Dujblevic y Vicent Poirier siendo los grandes animadores desde las alturas.

Tras el descanso, Baskonia empezó mucho más enchufado que el conjunto de Txus Vidorreta, con Marcelinho Huertas liderando a los suyos en un en cuarto que empezó con mucha más anotación de la vista en los minutos anteriores al descanso.

Al ecuador del periodo, Baskonia había remontado el marcador y había vuelto a mostrar las pájaras en el tercer cuarto con Voigtmann y Huertas como grandes referentes en el ataque baskonista que ponían en jaque todo el juego local.

El tercer cuarto acabó con un 55-53 favorable a los locales que vieron como revulsivo a un Tibor Pleiss, con 4 puntos seguidos fue el revulsivo necesario para volver a gobernar en el partido, donde Aaron Doornekamp fue factor sorpresa apoyando al alemán.



El último cuarto empezó con Tibor Pleiss al mismo ritmo con el que había terminado el último cuarto, con un Guillem Vives que sin hacer mucho a simple vista ( un triple en dos aciertos) tenía su +/- rondando la decena y Erick Green arrancando poco a poco.

Patricio Garino estaba siendo el elemento sorpresa de un Baskonia que había vuelto a decaer tras 'aprovechar el bug' del cuarto anterior y que trataba de reencontrar su esencia en la pista, salvo en momentos puntuales que penetraban sin oposición (un hecho que había ocurrido durante todo el partido).

A pesar del factor Wil Thomas, Baskonia acabó remontando por el abuso local desde le triple acabo rematando lentamente a los locales con Matt Janning como mano ejecutora y directora del equipo vasco.



71-81 acabó el encuentro con la sensación de que a pesar de parecer desconectado, Baskonia llevo el partido por donde quiso y lo ganó cuando creyó conveniente para no levantar sospechas, sigilosamente y sin sospecha, el modus operandi del técnico barcelonés que sigue siendo el actual técnico campeón de Liga Endesa...


Pedro Martínez afirmó en rueda de prensa que su equipo había jugado una "mejor segunda parte" donde había hecho mismo trabajo y mejor acierto" con "un punto más de actividad en defensa" en los momentos calientes del partido que les dieron la victoria, así como mostrarse "emocionado y agradecido" por el recibimiento efusivo que la afición le había hecho en su regreso.


Por su parte, Txus Vidorreta se sentía confiado de cara a la parte final de la temporada, esperando "el primer momento donde pueda entrenar" a todos sus jugadores por primera vez esta temporada, sobretodo orientándoles para que "no se resientan de sus lesiones" . Respecto al partido vió " debilidad en la pintura ante la ofensiva de los jugadores pequeños" y para finalizar remarcó lo que en muchas palabras había dicho antes: " Tocar madera para tener al equipo sano" para tener un bloque capaz de aguantar el tramo final de la temporada en Liga Endesa que les puede devolver a la máxima competición europea.

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